La menopausia es una etapa fisiológica donde las mujeres suelen estar especialmente vulnerables a diversas enfermedades y sintomatologías a nivel físico y mental, entre las cuales puede aparecer la osteoporosis. En este post hablaremos de lo importante que es cuidar la ingesta de calcio durante la menopausia y así evitar la osteoporosis.
Cómo afecta la menopausia al cuerpo
Una de las razones de vulnerabilidad fisiológica durante la menopausia se produce por los cambios corporales que podrían afectar a la nutrición: el fin de la edad reproductiva acarrea una serie de cambios a los que se debe adaptar cuanto antes para así disminuir los malestares de esta etapa.
Debemos recordar que la menopausia no es más que una situación donde los ovarios dejan de producir óvulos y por tanto, va desapareciendo la menstruación y la posibilidad de embarazo. Esto porque se disminuye progresivamente la producción de las hormonas sexuales como estrógenos y progesterona, lo que trae síntomas y cambios que van desde depresión, irritabilidad, baja libido o subida de peso. La edad promedio donde comienza la menopausia oscila entre los 40 a 52 años.
¿Para qué sirve el calcio y qué es la osteoporosis?
El calcio es el principal mineral que protege y fortalece la masa ósea, estando presente en un 99% en ésta. Y para todas las personas a partir de los 30 años el recambio regular de hueso viejo por hueso nuevo sucede de forma más lenta, esto significa que el cuerpo pierde masa ósea más rápido de lo que puede formarlo.
Entre las enfermedades más comunes de los huesos está la osteoporosis, causante de un fuerte debilitamiento óseo, y puede suponer un mayor riesgo de desarrollarla en cuanto aparece la menopausia.
En algunas personas, como las que fuman o pasan por procesos médicos complejos como la quimioterapia, la menopausia puede aparecer antes. Y con este perfil existen más probabilidades de tener un déficit de calcio.
La deficiencia de calcio hará que el cuerpo consuma el calcio ya incrustado en la misma estructura ósea, por lo cual los huesos pierden su rigidez y fuerza. Los malos hábitos de alimentación, baja o nula ingesta de lácteos y vegetales o el sedentarismo es lo que da pie a estas carencias nutricionales.
Cómo mejorar tu consumo de calcio
Por eso, cómo no, la recomendación de los especialistas es tener una dieta sana y si es necesario, tomar suplementos de calcio para así evitar todo riesgo de déficit de este mineral.
Algunos alimentos con calcio son el brócoli, leche, salmón, almejas y yogur. Por supuesto, la principal fuente de calcio es de origen animal, por lo que las personas que siguen una dieta sin proteína animal deben asegurarse de consumir alimentos fortificados, suplementos de calcio o proteína vegetal rica en calcio como la soja.
Muchas personas tienen osteoporosis sin saberlo hasta que sufren una fractura, que es la consecuencia más común de la enfermedad. Las fracturas son más usuales presentarlas en zonas vertebrales, en la cadera o muñeca.
Básicamente la menopausia aumenta más las posibilidades de padecer osteoporosis, que aparece tras graves déficit de calcio u otros nutrientes muy importantes, como la vitamina D. De hecho, la osteoporosis afecta a las mujeres en su mayoría.
El especialista en reumatología es la persona encargada de guiar a las personas para que obtengan el mejor tratamiento para su osteoporosis, con fármacos específicos para su caso. Del mismo modo, recordamos que lo mejor es evitar, así que debemos cuidar la dieta e hidratación, hacer ejercicio y dormir lo suficiente. Como vimos ya, son estos hábitos los que forman parte imprescindible del tratamiento de la osteoporosis.